7 Consejos para usar mejor las redes sociales y tener paz mental
Constantemente nos bombardean mensajes contradictorios entre sí. En la actualidad veo una incoherencia muy marcada en los creadores de contenido digital donde te piden que consumas su material y luego te dicen sal corriendo de aquí porque esto nos está matando jajaja
Y entonces, en mi opinión eso nos pone peor. No nos da una solución sino más problemas, porque estamos constantemente en el debate de quiero aprender algo nuevo, pero no quiero consumir tanto en digital, pero tampoco tengo otras opciones y menos ahora en PANDEMIA. Nos estamos enloqueciendo un poco…
No es para menos, todos estamos viviendo lo mismo. A todos nos pasa que encontramos cosas muy positivas de este entorno digital, pero a la vez no sabemos cómo tener un control adecuado. cómo establecer los límites correctos, cómo consumir de forma ideal.
Encontrar el equilibrio entre aprovechar este océano de posibilidades infinitas en la red y tener mi propia vida en el lugar número 1 sin perderme, no es tarea fácil, pero sin duda es uno de mis mayores propósitos, y no hablo del 2021, lo vengo trabajando hace mucho más tiempo.
Todavía tengo mucho por mejorar, todavía no me siento completamente en equilibrio, pero si te puedo decir que mi mente ha podido encontrar mucha más paz desde que empecé a hacer estas cosas que te quiero contar, y si tal vez como yo, en otro momento de mi vida te has sentido saturad@, culpable, ansios@ o estresad@ por no saber manejar la situación con tus hábitos de consumo, seguro que estos pequeños pasos comenzarán a hacerte notar una gran diferencia.
1. A quién sigo y a quien dejo de seguir en mis redes. Es humanamente imposible que sigas (que puedas ver la vida, información o educación) de más de 1000 cuentas. Y si eso es imposible, ¿para qué seguimos tanta gente o marcas? Yo dejé de seguir marcas comerciales, artistas famosos con perfiles públicos (cuando quiero cotillear voy a sus cuentas y la info siempre está disponible) y sobre todo dejé de seguir a todas aquellas cuentas que no me aportaban valor. Recuerda que Instagram te dice cuáles son los perfiles con los que menos interactúas, así que es muy fácil ir depurando tu cuenta.
Piensa que hacer esto te libera espacio para ver lo que publican personas o marcas que de verdad dan valor a tu vida.
2. Controla cuánto tiempo estás en tus redes con la herramienta que te da Instagram u otras aplicaciones. He puesto una alarma en IG que indica cuando ya he completado 1 hora al día en esta red social y reviso mis tiempos promedio de vez en cuando. Cada vez que noto que están subiendo trato de entrar en “detox” me pongo retos de no coger el móvil cuando un impulso me lo pide y así me siento en control de mi misma.
3. Determina tus propios lugares SAGRADOS: Hay lugares y momentos para todo. Una reunión con amigos, familiares, almuerzos o cenas, cuando estás viendo una peli, cuando estás comiendo y aun mejor, cuando estás de vacaciones. Todos esos momentos deberían ser SAGRADOS, no son momentos de usar el móvil. Sí, todavía tengo que mejorar yo misma en eso, pero cuando caigo de nuevo en el error trato simplemente de darme cuenta y volver a intentar. Por supuesto habrá excepciones, por ejemplo en vacaciones puedes bajar mucho el consumo pero seguro que no un 100%, pero cuando se trata de horas, eso sí que lo podemos hacer con facilidad.
4. Usar el móvil solo para fotos y volver a dejarlo: Haciendo referencia al punto anterior, no creo que hacer una foto linda para recordar sea malo o imprudente, esto se trata de no ir a los extremos, y si hoy día la tecnología me permite poder recordar muchas más cosas de mi vida por qué no hacerlo, soy fan de recordar y revivir con fotos. Así que en esos momentos sagrados el uso del móvil para la foto en mi vida está permitido. Una vez se toma la foto se guarda en su lugar y listo. Si quiero publicarlo trato de hacerlo más tarde, cuando haya acabado todo. Lo que no puede ser es que estemos viviendo el momento mágico, tomemos la foto, la publiquemos, la retoquemos y tiremos la magia a la basura… jajajaja
5. Alarmas y notificaciones, eliminar todas no es la solución: Eliminarlas por completo no es viable para mi. Lo que si hago es que siempre tengo el móvil en silencio. No tengo ni siquiera el modo vibración. Ya de por sí reviso el celular constantemente, así que si hay algo importante que alguien quiera decirme seguro que lo veré en menos de 2 o 3 horas, el mundo no acabará en ese tiempo. Si es algo urgente seguro que me llamarán directamente. Cuando mi madre no me ubica, sabe que puede llamar a Sebas jajaja él si tiene todo el volumen a tope.
5. Búsquedas consientes y bloqueo de tipos de contenido: Ufff esto si que marcó una diferencia. Si todavía no sabes que esto es posible debes practicarlo. En Facebook o Instagram puedes decirles a ciertos tipos de anuncio que no quieres que aparezcan. En los puntitos de arriba de la publicación. También puedes observar contenido que sí te gusta conscientemente. Dale like, y observa la publicación por más tiempo de lo normal, así es como el algoritmo trabaja a tu favor y te muestra más de lo que sí necesitas, e incluso descubres los tesoros escondidos de cuentas que jamás hubieras imaginado encontrar. No sabes lo que he descubierto a cerca de embarazo, maternidad y todo este rollo del que no sabía una pizca. Jejeje
6. Identifica tu propio “demonio” rétalo y véncelo, ¿consumes o publicas de más?. Si alguna vez has sentido una necesidad inexplicable de publicar cosas solo por el qué dirán, ponte el reto de no hacerlo durante un tiempo. Oye esto no es fácil admitirlo, yo tuve que entrar en introspección muy profunda para decirme esa verdad (sí, a veces me he dejado llevar por el querer aparentar algo a los demás, soy humana) pero cuando lo admtí, y luego me reté a no hacerlo, ¡¡Diosss qué liberación tannn grande!! También está el demonio del “Querer consumir” cada 5 minutos, entonces tu reto es ponerte un tiempo mínimo de no coger tu móvil, verás que se siente muy bien cuando te das cuenta que han pasado 5, 6 horas o días enteros de no haberlo tomado y sobreviviste.
Finalmente, la mejor herramienta de todas, sin duda alguna ha sido comenzar a conocer el mundo de la meditación y el mindfulness,
Finalmente, la mejor herramienta de todas, sin duda alguna ha sido comenzar a conoces el mundo de la meditación y el mindfulness, ufff esto es lo que de verdad ha marcado un antes y un después en el manejo de mis emociones. Lo anterior que te he compartido son las consecuencias, pero el comenzar a conocerme por dentro es la verdadera causa. En esta cuenta no te hablaremos en profundidad del tema, porque no es nuestra área, sin embargo notarás que hablaremos del tema constantemente, porque realmente consideramos que para lograr un mundo mejor, mejores empresarios, mejores herramientas tecnológicas y mejores hábitos de consumo, conocernos a sí mismos lo es TODO.
He querido empezar este año con este post porque de verdad creo que todos lo necesitamos. A mí me encantaría leerte y saber si tienes alguna otra herramienta que puedas darme. O si simplemente esto que te he contado te parece útil.
Si te ha gustado este tipo de contenido me encantará que me lo hagas saber y así puedo seguirte compartiendo más de esto por aquí.
Un abrazo